La cantante definió al ex líder de Sumo como su "ángel de la guarda", luego de que este la haya protegido de un sinvergüenza. "Yo era muy joven y sola no hubiera sabido qué hacer con ese tipo ahí", confesó. Conoce la historia.
En una entrevista con la revista Rolling Stone, Juana Molina contó que Luca Prodan la salvó de ser víctima de violencia de género cuando el conductor de un vehículo que los transportaba quiso sobrepasarse con ella.
“Era bastante ridículo. Yo iba en el asiento del acompañante y Luca en el de atrás. De golpe el tipo me empezó a hacer preguntas y por dentro pensaba: ‘Ay, este pesado me está tirando onda, la puta madre’”, detalló.
Posteriormente, las bromas de mal gusto pasaron a un grado mayor y la cantante sintió que el individuo le puso la mano en el muslo. "Yo era muy joven y sola no hubiera sabido qué hacer con ese tipo ahí", confesó.
Ante semejante provocación, el ex Sumo no se quedó callado y decidió defenderla. "¿No te das cuenta que no quiere que la toques? ¿No tenes nada en la cabeza? ¡La chica no quiere saber nada con vos", le gritó Luca al individuo, según recordó Molina.
Desde ese entonces, Juana definió a Prodan como su "ángel de la guarda", a quien conoció en el Café Einstein y el Zero Bar, epicentros del under en la Ciudad de Buenos Aires durante la primavera democrática, donde actuaban las bandas que marcaron el rock nacional en los '80.
En una entrevista con la revista Rolling Stone, Juana Molina contó que Luca Prodan la salvó de ser víctima de violencia de género cuando el conductor de un vehículo que los transportaba quiso sobrepasarse con ella.
“Era bastante ridículo. Yo iba en el asiento del acompañante y Luca en el de atrás. De golpe el tipo me empezó a hacer preguntas y por dentro pensaba: ‘Ay, este pesado me está tirando onda, la puta madre’”, detalló.
Posteriormente, las bromas de mal gusto pasaron a un grado mayor y la cantante sintió que el individuo le puso la mano en el muslo. "Yo era muy joven y sola no hubiera sabido qué hacer con ese tipo ahí", confesó.
Ante semejante provocación, el ex Sumo no se quedó callado y decidió defenderla. "¿No te das cuenta que no quiere que la toques? ¿No tenes nada en la cabeza? ¡La chica no quiere saber nada con vos", le gritó Luca al individuo, según recordó Molina.
Desde ese entonces, Juana definió a Prodan como su "ángel de la guarda", a quien conoció en el Café Einstein y el Zero Bar, epicentros del under en la Ciudad de Buenos Aires durante la primavera democrática, donde actuaban las bandas que marcaron el rock nacional en los '80.